El alcalde traslada a la consellera Barceló la situación preocupante de la gestión sanitaria en el departamento de Salud de Dénia

El alcalde de Dénia, Vicent grimalt, acompañado por José Ramiro, presidente del Consell de Salud del departamento de Dénia, y Javier Scotto, concejal  de Sanidad, han trasladado a la Conselleria su "preocupación y malestar" sobre la gestión que está llevando a cabo la concesionaria de la Sanidad en el Departamento de Salud de Dénia, en cuanto a la atención a la ciudadanía, especialmente en los ámbitos de la salud Primaria y de salud mental, y las condiciones laborales de los profesionales.

En la reunión, celebrada a instancia de Grimalt, se le ha trasladado a la consellera de Sanidad, Ana Barceló, que en la actualidad la concesionaria se excusa en que no encuentra profesionales. El alcalde de Dénia lo considera, “un hecho inadmisible que no se puede excusar al ser la responsable de garantizar un servicio digno por contrato”. También han insistido que la concesionaria es ls que tiene que poner solución “y mejorar las condiciones laborales para conseguir profesionales y que no se vayan”.

Para el alcalde de Dénia, “queda patente que el modelo de gestión privada para un servicio público como es la sanidad, donde la empresa mercantiliza la salud de los vecinos y vecinas de la comarca, es un modelo fracasado sobre todo en cuanto a la atención final de los usuarios”. Por su parte, José Ramiro, ha comentado que “esta situación actual de malestar con la concesionaria es más que evidente por parte de la mayoría de sectores de la comarca y es causada por su mala gestión, no de ahora, sino de hace años”, ha destacado el presidente del Consell de Salud, José Ramiro. 

Por su parte, la consellera de Sanidad ha confirmado que la hoja de ruta es finalizar el contrato con la concesionaria en febrero de 2024. El proceso se iniciará a principios de 2023 como marca el contrato, “puesto que sin lugar a dudas es necesaria la gestión directa del departamento”. 

Además, la Consellería está trabajando para fiscalizar y garantizar que “la gestión de la sanidad en la comarca sea la adecuada y que los vecinos y vecinas sufran el mínimo posible la gestión de la privatización de la sanidad”.