Incompatibilidad del factor Rh de la sangre en la mujer embarazada

Incompatibilidad del factor Rh de la sangre en la mujer embarazada
  02/12/2019

Dr. MARIANO MARTÍN-LOECHES DE LA LASTRA (*)

La incompatibilidad Rh es una forma de enfermedad hemolítica del recién nacido, que se desarrolla cuando una mujer embarazada tiene sangre Rh negativa y el bebé que lleva en su vientre tiene sangre Rh positiva. Cuando los glóbulos rojos del feto entran en contacto con el torrente sanguíneo de la madre por la placenta, el sistema inmune de la madre trata a las células fetales Rh positivas como si fuesen una sustancia extraña y crea anticuerpos contra las células sanguíneas fetales, destruyendo los glóbulos rojos circulantes de éste en el momento que los anticuerpos anti-Rh positivos atraviesan la placenta hasta el feto.

            La isoinmunización consiste en la producción materna de anticuerpos hacia un antígeno de membrana de los hematíes fetales, ausente en la madre (y por tanto de origen paterno), como respuesta a una sensibilización previa. Los hematíes son destruidos por el sistema retículo-endotelial fetal después de producirse una reacción antígeno-anticuerpo. La anemia fetal o neonatal secundaria a una hemólisis de origen inmunológico se ha llamado también Enfermedad Hemolítica Perinatal.

            Cada mujer que quede embarazada debe determinar su grupo sanguíneo, RhD y anticuerpos irregulares (Coombs indirecto), así como el grupo sanguíneo y RhD del padre en la primera visita.

            Para las pacientes embarazadas con un grupo Rh negativo, se deben hacer pruebas sanguíneas para detectar si se ha desarrollado anticuerpos que demuestren aloinmunización causado por cantidades muy pequeñas de hemorragia fetomaterna.

            Inmediatamente después del nacimiento de cualquier niño con una madre Rh negativa, se debe examinar la sangre del cordón umbilical del bebé para determinar el grupo sanguíneo ABO y el Rh del neonato, medir los niveles de hemoglobina y su hematocrito, un análisis del nivel de bilirrubina sérica y realizar una prueba de Coombs directa.

            En RhD negativas se determinaran los anticuerpos irregulares cada trimestre del embarazo, nunca antes de un mes posterior a la administración de gammaglobulina.

            Si la madre es Rh negativo, su sistema inmunitario trata a las células fetales Rh positivas como si fuesen una sustancia extraña y crea anticuerpos contra dichas células sanguíneas fetales. Estos anticuerpos anti-Rh pueden pasar de nuevo a través de la placenta hacia el feto y destruir los glóbulos rojos circulantes de éste.

            Cuando los glóbulos rojos se descomponen, producen bilirrubina, la cual hace que el bebé se ponga amarillo (ictericia). El nivel de bilirrubina en el torrente sanguíneo del bebé puede variar desde leve hasta altamente peligroso.

            Debido a que toma tiempo para que la madre desarrolle anticuerpos, con frecuencia, los primeros bebés no se ven afectados, a menos que la madre haya tenido embarazos interrumpidos o abortos espontáneos anteriormente que sensibilizaron su sistema inmunitario. Sin embargo, todos los hijos que ella tenga después de esto que también sean Rh positivos pueden resultar afectados.

            Las inyecciones de gamma-globulinas g Anti D previenen el desarrollo de anticuerpos contra la sangre Rh positiva. Las mujeres con un tipo de sangre Rh negativo deben recibir inyecciones: durante cada embarazo, si tienen un aborto espontáneo o un aborto provocado, después de exámenes prenatales como amniocentesis y biopsia de vellosidades coriónicas y después de una lesión al abdomen durante un embarazo.

(*) Especialista en Ginecología y Obstetricia.

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