Luto en el Club Náutico y en los moros i cristians por la muerte del dianense Manolo Ferrer

Tenía 82 años y canalizó sus dotes artísticas al mundo de la construcción

El mundo de los moros i cristians y el de la náutica se han visto conmocionados esta semana con la desaparición de Manuel Ferrer Cabrera, que fue uno de los fundadores de la AMICC y comodoro del Club Náutico de Dénia durante más de veinte años. Manolo, tal y como era conocido tanto en ambos ambientes y en la sociedad dianense, era el pequeño de una familia de seis hermanos, y desempeñó su actividad profesional junto a su hermano Miguel y su cuñada Janet en la empresa Villas Ferrer, pionera de la promoción, construcción y alquiler turístico en la capital de la Marina Alta. Dotado de una sensibilidad fuera de lo común para el dibujo y el diseño, su principal ocupación era dar el toque característico de la empresa a las viviendas y chalets que, desde su constitución en los años setenta, hicieron de la firma una referencia en toda la comarca, con su singular toque decorativo que combinaba la modernidad y funcionalidad con los elementos tradicionales. En ello, confesaba que su gusto por aquella tipología, que tenía como referente los márgenes de piedra y los detalles rústicos, obedecía a "tractar de donar-li ànima" a las construcciones con que las que la promotora supo satisfacer la creciente demanda del turismo foráneo, esencialmente británico, desde los años sesenta hasta la actualidad, en urbanizaciones como La Finca, El Oasis o Santa Lucía. Manolo Ferrer tenía 82 años. El sepelio se oficiará a las 13.3o horas en la Parroquia de San Antonio.