Por un futuro sin perros abandonados

Hace un par de semanas nos despertamos con la noticia que Holanda ya no tiene perros vagando por las calles.

Lo han conseguido en pocos años con un trabajo serio, coherente y muy eficaz.

Nada difícil y nada más difícil, hablamos de conciencia ciudadana, extendida a los gobernantes, ayuntamientos y ministerios.

Estos vecinos de la vieja Holanda han trabajado muy duro, han puesto de su parte para concienciar a posibles imposibles e invertir dinero del Estado y seguramente de muchos particulares, profesionales del sector y otros muchos colaboradores.

Los puntos son muy sencillos, formar a profesores para que creen conciencia en sus alumnos es el primer paso.

Formar y concienciar a profesionales y a quienes de un modo u otro trabajan con perros.

Conseguir que quienes llevan el peso de Asociaciones Protectoras comprendan que aún pueden aprender algo del mundo de los perros.

Hicieron una esterilización masiva, TODOS los perros, hembras y machos fueron esterilizados mediante campañas gratuitas y de bajo coste para quienes puedan hacerlo como un aporte a la causa.

Pusieron un impuesto realmente alto a la venta de perros, ya sea de criadores o de cualquier tipo de comercio con sanciones altísimas a quienes se salten las normas.

No este es el espacio para seguir detallando, valga este resumen para avergonzar a cualquiera ya que en España somos el desastre de Europa "también" en el tema de perros abandonados.

Los últimos informes hablan de ciento cuarenta mil perros abandonados o perdidos al año, sólo en Dénia, la media mensual es de sesenta perros recogidos por APAD en un trabajo de siete días a la semana durante las veinticuatro horas.

La primera causa es la reproducción descontrolada, el efecto son miles de cachorritos recién nacidos que sobrepasan las posibilidades de albergue de cualquiera.

Así las cosas, como pasa en política, si hasta ahora nadie ha sido capaz de solucionar esta vergüenza, parece imprescindible que se delegue en alguien la dirección de un proyecto que sea eficaz, serio y coherente como han hecho los vecinos holandeses.

Ya está bien de tanta falta de conciencia, las nuevas generaciones son más sensibles, cada vez son menos los casos de violencia y maltrato animal por parte de gente joven, pero...siempre hay un pero, les falta formación y muy especialmente apoyo oficial.

Un ruego a quienes manejan los ayuntamientos y ministerios:

Tengan en cuenta que amar a los animales forma parte del amor entre los seres humanos.

Yo trabajo por un futuro sin perros abandonados ¿Y tú?