Un empresario holandés dirigía desde Calp una red de comercio de carne de caballo no apta para el consumo
Actuaba en varios países de Europa y los beneficios superan los 20 millones de euros
La Guardia Civil, en colaboración con Europol, ha desmantelado una red internacional que comerciaba con carne de caballo no apta para el consumo. El grupo era dirigido por un empresario holandés afincado en Calp, donde mantenía una vida discreta.
La operación ha sido desarrollada en coordinación con Francia, Portugal, Bélgica, Italia, Rumanía, Suiza, Holanda y Reino Unido. En España han sido detenidas 65 personas en siete comunidades autónomas por los presuntos delitos de maltrato animal, falsedad documental, prevaricación, contra la salud pública, blanqueo de capital y organización criminal, alcanzando a siete Comunidades Autónomas.
La investigación se inicio en 2013 cuando fueron detectadas en Irlanda hamburguesas de vacuno que contenían carne de caballo. Aunque en algunos análisis se detectó fenilbutazona, al ser esta presencia muy leve, se descartó que pudiera ocasionar problemas de salud pero se siguió adelante al detectarse fraude alimentario. A partir de ahí, se descubrió el fraude de la venta de carne de caballo no apta para el consumo.
Los efectivos de la Guardia Civil consiguieron el verano pasado localizar en Calp al empresario holandés relacionado con el caso de las hamburguesas de Irlanda. Desde la Marina Alta, mantenía varias líneas de negocio que enlazaba con las actividades que ya controlaba en países del norte de Europa.