Voreres amples i més arbres al carrer Sagunt 

El Ayuntamiento de Dénia ha sacado la licitación de la realización de las obras del proyecto de reurbanización de la calle de Sagunto, financiado con Fondos Next Generation EU. Se plantea una vía más amable peatonal con aceras anchas y la plantación de arbolado.

El ámbito de actuación de las obras se ubica en la calle Sagunto, en el barrio denominado Paris- Pedrera, entre la Avenida de Alicante y el Paseo Saladar. La superficie del ámbito de actuación es de aproximadamente 4.100 metros cuadrados. El presupuesto total de licitación de este servicio es de 673.774,06 euros (IVA no incluido). Las empresas interesadas pueden presentar sus ofertas hasta el próximo 17 de abril. El plazo estimado para la ejecución de las obras es de siete meses y medio.

El equipo de gobierno pretende, con esta medida, revitalizar comercialmente la calle Sagunto, dotándola de mejores servicios y zonas de paso amplias y agradables que mejoren la visibilidad de los comercios y con ello su calidad. En dicha calle, la mayoría de los bajos existentes se encuentran destinados al pequeño comercio, y debido a que las aceras son muy estrechas (anchura de 1,80 metros), para los peatones se hace muy complicado transitar. Además, en ambos lados de la calle existe estacionamiento en batería, lo que incrementa la sensación de estrechez para los viandantes. Por otro lado, el arbolado de la zona es inexistente, existiendo solo tres árboles en los chaflanes de la intersección entre la Calle Sagunto con el Paseo Saladar. Asimismo, el espacio para el descanso de los transeúntes se limita a tres bancos localizados en los extremos de la calle.

La concejala de Territorio, María Josep Ripoll, ha expuesto que este proyecto tiene como finalidad principal “hacer más agradable esta arteria comercial de la ciudad”. El objetivo es mejorar la accesibilidad de la calle, incrementar el espacio dedicado al peatón, dotando a la zona de una mejora en el arbolado y en el mobiliario urbano, para que se generen áreas de sombra y de descanso para los transeúntes. Con todo ello, los objetivos de la presente actuación son facilitar los itinerarios comerciales proporcionando zonas amplias de paso y mejorando la accesibilidad a todas las personas; renovar las infraestructuras soterradas de la calle, y conectar las bajantes de pluviales de los edificios bajo las aceras; incorporar arbolado para incrementar el confort climático de la calle, eliminar contaminación atmosférica y mejorar la imagen urbana de la zona.

Una de las medidas principales es la ampliación de las aceras a tres metros de ancho, mejorar los vados peatonales, y la eliminación de los obstáculos y de barreras arquitectónicas para las personas con discapacidad o movilidad reducida, por ejemplo, para cumplir con la normativa vigente.

Además, el aparcamiento de la calle será en línea, como ya se hizo durante la pandemia, y se perderán algunas plazas a favor de ganar una calle que sea más verde, agradable, cómoda y transitable sin obstáculos peatonales. Se reordenarán asimismo las farolas instaladas actualmente, hasta colocarlas a 50 cm del borde de la acera, lo que permitirá a su vez mejorar la accesibilidad de la calle.