Holter Subcutáneo: Una herramienta innovadora en el monitoreo cardíaco
La monitorización cardiaca juega un papel fundamental en el diagnóstico y manejo de diversas afecciones cardiovasculares. Tradicionalmente, el registro Holter ha sido la principal herramienta para la monitorización ambulatoria del ritmo cardíaco durante períodos prolongados, sin embargo, con los avances en la tecnología médica, ha surgido una alternativa prometedora: el holter subcutáneo.
El Dr. Alfonso Valle, cardiólogo del Hospital San Carlos del Grupo HLA detalla que, “a diferencia del holter convencional, que implica el uso de electrodos externos durante un período de 24-48 horas, el holter subcutáneo se implanta debajo de la piel del paciente a través de un proceso mínimamente invasivo pudiendo llegar a durar 4,5 años y permitiendo monitorizar la actividad eléctrica durante ese tiempo”.
La lipotimia o el síncope es una enfermedad del corazón, que se define como la pérdida de conciencia súbita de pocos segundos de duración, y recuperación completa posterior, por lo que este dispositivo es determinante para saber lo que sucedió exactamente en el momento en el que se perdió el conocimiento.
El Dr. Valle nos dice, “que otros beneficios destacados del holter subcutáneo es su capacidad para capturar eventos cardíacos transitorios que podrían pasar desapercibidos durante un monitoreo convencional, esto incluye episodios de taquicardia, bradicardia, fibrilación auricular y otras arritmias potencialmente peligrosas que podrían requerir intervención médica”.
Además de su utilidad en el diagnóstico de arritmias, el holter subcutáneo también desempeña un papel crucial en la evaluación de la eficacia de tratamientos farmacológicos y en la planificación de procedimientos invasivos como la ablación por catéter. Al proporcionar una visión detallada de la actividad eléctrica del corazón en condiciones cotidianas, este dispositivo ayuda a los médicos a tomar decisiones informadas sobre la gestión del paciente.
Resumiendo, cuando los episodios ocurren de forma muy esporádica el holter de 24 horas no nos va a aportar suficiente información. Para estos casos, y sobre todo cuando los pacientes tienen determinadas condiciones de riesgo añadidas, disponemos del holter subcutáneo, capaz de registrar de forma continua el ritmo cardiaco por un período de hasta 4,5 años. Los pacientes que más se benefician de esta técnica son los pacientes con síncopes o mareos o pacientes con alguna patología cerebrovascular (ictus), dado que el holter subcutáneo detecta automáticamente un tipo de arritmia muy frecuente asociada con esta patología, llamada fibrilación auricular.