Centro gana el premio de la crítica local de CANFALI MARINA ALTA
Las fallas recurren a la crítica e ironía sobre lo que pasa en su entorno y encuentran un espacio para recordar la figura de Paco Serradell
Las obras inacabables del trenet, el tan anhelado retorno de la vía ancha y la disputa por la estación entre los pueblos de la comarca, los efectos de los temporales sobre las playas, las relaciones entras socialistas y nacionalistas al Ayuntamiento de Dénia, la peatonalización, el precio de la recogida de la basura, los ruidos y peleas en el entorno de una sala de fiestas de Marqués de Campo... Son solo algunos de los asuntos que han criticado o sobre los cuales han ironizado las fallas de Dénia 2022. El premio Luis Francisco Carrió que otorga CANFALI MARINA ALTA a la mejor crítica local ha sido para Centro, que presentaba una completa col•lecció de críticas sobre temas locales. Entre ellas, hubo un lloquet para el recuerdo de cuatro personas estimadas por la comisión, entre ellas nuestro director Paco Serradell, al cual también dedicaron muñeco y letra en la falla París Pedrera. Fueron estas dos las fallas más votadas por el jurado, que agradeció el interés demostrado por casi todas las comisiones para hacer crítica local, algunas en casi todas las escenas del monumento.
Lo Centro ha remarcado el papel de Paco Serradell como cohesionador de la Marina Alta desde la prensa comarcal, así como el hecho que incentivara la crítica local “que a las fallas hacía tanta falta”. Dedicó también unas palabras a Vicent Balaguer, autor del himno de la falla, escorcollador de la vida y el pasado de la ciudad y que ha dejado empujón del “testigo de una vida valiente”. De nuevo, ha recordado la figura del médico Paco Torrent y reivindicó (y ya van 17 años) que se ponga su nombre, si no en el hospital, en una plaza. Hay crítica para el gobierno municipal, en alusión al problema que se le presenta al alcalde en la hora de elegir entre salvar la primera línea de casas de la playa o echarlas, defensa del consumo de productos de proximidad, una apuesta por el uso de biodegradables por parte de los falleros como gesto de rechazo a los residuos plásticos que hacen daño en el mar y también una escena dedicada a la pastelería Agulló, que recientemente cerró las puertas después de haber endulzado durante 120 años el paladar de los deniers.
Si lo Centro pide una corte de honor mixta y bromea con la vestimenta del presidente de la Junta Local Fallera (“de la Fashion Week ha llegado y los camals se ha recortado”), también las otras comisiones han tocado temas falleros. Además de las cuestiones internas en que cada cual ironiza, Bajo el Mar reclama de nuevo el Museo Fallero para la ciudad y critica la “agenda ocupada” del Centro Social.
Solo hubo un punto de diferencia entre la crítica ganadora y la de la falla París Pedrera. En este caso, se ha intentado hacer valer las figuras de la falla para hacer crítica. Además de los muñecos dedicados a Paco Serradell i Vicent Balaguer, se representa la nueva relación entre los jefes del PSOE y Compromís al ayuntamiento con un muñeco que mueve una títere. A la política municipal se dedica otro cuadro completo, que hace referencia a asuntos como el hormigón a borde mar o la peatonalización del centro.
Como “santets” pintan al Saladar los miembros del equipo de gobierno, en una graciosa escena donde van referencia a la transparencia. Al Diana rotulan las lápidas de un cementerio con comentarios cargados de ironía sobre los grupos municipales en atención al resultado de las últimas elecciones, como por ejemplo “PP sin pena ni gloria”, “PSPS-Compromís nata se lo que parece”, “Gente de Dénia no estaba muerto, estaba de parranda” o “Vox, próximo renacimiento 2023?”. Dedica también esta falla una supuesta portada de CANFALI MARINA ALTA a cuestiones relacionadas con el cambio climático y el medio ambiente.
Son muchas las cuestiones que toca la crítica fallera (la subida del servicio de la basura en Campaments y Les Roques), la barrera que impide en verano llegar al final de Les Rotes (“la cueva no es la única tajada”), la urbanización de la plaza Valgamedios o la plataforma constituida contra la peatonalización del centro a la falla de la Oeste, el bus urbano, el D*na, el Plan General, el cambio de intendente en jefe de la Policía Local.... La lista no se acabaría nunca, así que mejor visitar las fallas y leer las críticas antes de la quemó. Todavía están a tiempo.
Las puntuaciones
El jurado de la crítica local no lo ha tenido este año nada fácil, como se puso de manifiesto en el col•loqui posterior al recorrido. No solo por la cantidad de críticas -que eran muchas- sino también por la calidad y el buen uso del lenguaje y las construcciones. Lo Centro se llevó 9 votos; París Pedrera, 8; Diana, 4; Las Rocas, 3; y Saladar, 2.
A la convocatoria del jurado hubo algunas bajas, muchas de ellas por el mal tiempo. Aun así, y desafiando a la lluvia, se hizo el recorrido entero. En esta ocasión, y a diferencia de las ediciones anteriores, la visita se ha hecho a pie y por la mañana para dar tiempo a las comisiones a tener la falla acabada.
El tiempo de reflexión se hizo en el salón del Hotel Costa Blanca, donde se sirvió un almuerzo para los componentes del jurado. Pau Reig fue el encargado de presentar el nuevo integrante, JM Mulet, quien manifestó su voluntad de integrarse de pleno y repetir experiencia el año que viene. Nuestro director, José V. Bolta, agradeció todos los asistentes que no tuvieron miedo al agua y dedicó unas palabras para el recuerdo de Paco Serradell, alma del jurado y responsable en buena medida que las fallas de Dénia hagan, además de fiesta, buena crítica. Después de varias intervenciones, se hizo la votación que, como siempre, fue secreta.