La liga más larga del mundo se resuelve en los despachos
No pudo ser. El equipo femenino de la Escola Municipal de Futbol del Verger deberá conformarse con la segunda plaza del grupo V de la Segunda Regional Valenta, en una competición que se resolvió en los despachos. A pesar de su excelente trayectoria, con 21 triunfos en liga, apenas 2 empates y 2 derrota, y de haber igualado en lo alto de la tabla a casi todo -goalaverage particular incluido- con su rival directo el Monnegre Mutxamel, al final el título cayó del lado de las de la comarca de l’Alacantí.
La competición prometía mucha emoción en el arranque de la segunda vuelta, con estos dos equipos ya en lo alto de la tabla junto con el Dénia, que también peleó durante buen tramo del campeonato aunque abandonó la terna a última hora. Pero todo se torció en el desenlace, con una serie de rocambolescas circunstancias que tuvieron que resolverse en los despachos de los comités de disciplina federativos, y que resultaron desfavorables para los intereses del Verger.
Un final enrevesado que siguió un guión muy parecido al de aquella entretenida película de 2005 titulada El penalti más largo del mundo, que dirigió Roberto Santiago. Todo empezó a falta de dos jornadas, cuando el Monnegre no pudo jugar su partido en casa del Muro en la fecha establecida por incomparecencia del anfitrión. Tras la alegación del Verger, la liga se interrumpió para los equipos implicados y se pospusieron sus partidos al fin de semana siguiente. El de Muro había sido un campo muy complicado -donde ya habían pinchado El Verger y Dénia-, pero se lo pusieron fácil en esta ocasión al Monnegre, ya que comparecieron con insuficientes jugadores para completar un once, y el partido concluyó con 1-5.
Los de l’Alacantí continuaban líderes por una exigua diferencia de goles, que el Verger trató de recortar en casa del Alcoyano, ya en la última jornada. Mientras, el Monnegre recibía en casa al Playas de Campello, también un enemigo complicado. Pero la película siguió un guión distinto. En Alcoi se tuvo de suspenderse el partido a falta de media hora y con un marcador de 0-6. Una jugadora local se desvaneció y tuvieron que intervenir los sanitarios para su traslado en ambulancia, mientras el colegiado añadía más sustancia a la comedia con la suspensión del partido con el argumento de una agresión que nunca existió. Pero ahi no terminó todo, porque en Mutxamel no compareció el otro rival, el Playas de Campello, y se decretó otro aplazamiento del encuentro.
Así pues, la liga se iba a prolongar otra semana más, y eran ya catorce días sobre la fecha señalada para el final. El Verger regresó a Alcoi para completar su partido que terminó con victoria de 1-10, margen de goles muy justito para poder soñar con el título. Pero de Mutxamel, donde debían jugar a la misma hora, no se recibían noticias, en realidad porque no las hubo. El Playas de Campello había protagonizado su segunda incomparecencia, y la incertidumbre se desató de nuevo sobre el desenlace de la competición, que se iba a prolongar unos días más ya con la pelota sobre el tejado del comité.
Al final lo que el Verger se había ganado sobre el campo lo perdió en los despachos, porque la resolución fue tajante: retirar al conjunto de Campello de la competición y anular todos los resultados de este equipo de la segunda vuelta, lo que perjudicó al conjunto vergerino, ya que se le restaron cinco goles para quedarse a tan solo cuatro del alirón. Y la liga, que se presumía de gran interés y emoción, terminó adulterada y resuelta en los despachos, sin que el campeón tan siquiera lo pudiera celebrar sobre el terreno de juego.