La Quintó La’Anredrà “pasa” del canyis de las entradas de bous de Pedreguer
Este año no hay quintos ni quintas para aguantar el canyis en las entradas de bueyes, una situación tan inusual como controvertida a las Fiestas de Julio de Pedreguer. Y es que los miembros de la Quintó L’Anredrà no quieren saber nada del canyisset ni de las entradas. No es una cuestión anti, ni tampoco de género -de hecho las pocas veces, la primera noche y poco más, ha habido tal vez más chicas que chicos de la quintó detrás del canyis-. Es la falta de convicción y afición la que cuestiona y pose en peligro una tradición que poco tiempo atrás parecía tan divertida y arraigada en las Fiestas de Julio.
“No nos gustan los toros, preferimos hacer nuestra fiesta a la carpa”, ha asegurado uno de los miembros de la Quintà l’Anredrà. Tampoco ninguna normativa los obliga. Ni siquiera los gritos de “no hay quintos” o los tímidos silbatos y voces de protesta que se han sentido en la Plaza Mayor durante algunas entradas de toros los hace mover.
Ponerse detrás del canyis para frenar la manada de toros en el punto próximo al acceso al recinto taurino es toda una tradición más que vieja en Pedreguer por la cual las quintadas -encargadas de la función- han sentido siempre un gran entusiasmo. Pero ese fervor ha ido menguando en la última década. De hecho, en los últimos años ha sido habitual que las quintas fallaran algún que otro día detrás del canyis, sobre todo en las entradas más tempraneras y cuando se ha acumulado un gran déficit de horas de sueño que ha impedido a los jóvenes levantarse de la cama. Pero el caso de este año es extraordinario, porque se ve cada día. Simplemente no los gusta, y por tanto, pasan.
Moda o tendencia? El futuro del canyis está más en el aire que nunca. Cierto és, todo hay que decirlo, que hay una quintada muy corta de gent, i que para el próximo se espera una añada más bouera. Però todo está en función de cómo evolucione a medio plazo. De momento este año algunos voluntarios han intentado coger el cañizo y sustituir los quintos, por aquello de disimular y que no desaparezca del todo. Y justamente en este año que ha nacido una nueva peña taurina con el nombre, precisamente, de El Canyís. El tiempo dirá. De momento los aficionados taurinos asisten atónitos a un tema más para la controversia taurina.