Los pescadores de la Marina Alta en pie de guerra contra las nuevas restricciones que asfixian el sector del arrastre
“Es la desaparición de la gamba roja”
Los representantes del Pòsit de Xàbia, a través de su presidente Rafa Serrat y su vice presidente, Amadeu Ros, han dado voz al colectivo de pesca de amarre de la Marina Alta para protestar contra las nuevas restricciones que llegan desde Bruselas. Ambos han sido muy contundentes: es la desaparición de la gamba roja -y también de otras especies-. Al menos tal y como se conoce hasta ahora, como un producto gastronómico de primer orden y de proximidad, capturada con artes de pesca artesanales como es el amarre, también conocida como de “bou”.
La Unión Europea pretende reducir el número de días permitidos para faenar de las 140 jornadas a tan solo 27 a partir del próximo mes. “Es la peor agresión que hemos sufrido nunca en cien años de historia”, denuncia Ros. Precisamente ahora, cuando tras años de soportar restricciones las poblaciones de marisco y pescado se han recuperado en todo el litoral mediterráneo. “Quieren una mar llena de peces, pero sin pescadores”, se lamenta el portavoz del Pòsit. Ros alude a los informes de instituciones científicas que avalan la actividad pesquera de amarre como sostenible. Pero al mismo tiempo señala a los lobbies de ecologistas o de grandes comercializadoras internacionales de pescados y congelados que ejercen una fuerte presión sobre la clase política europea. “A nosotros no nos defiende nadie”, se lamenta.
El presidente ha sido crítico con la postura del gobierno central que “nos ha dado la espalda” a la hora de defender los intereses del sector en Bruselas. Si se ha mostrado más comedido, ha sido simplemente porque ha preferido morderse la lengua antes de dar rienda suelta a la mezcla que rabia e indignación que le embarga, a él y a todo el sector de esta pesca. En la Marina Alta se verán afectadas unas 35 embarcaciones -15 en Calp, 15 en Dénia y 5 en Xàbia-, del total de 130 en toda la provincia, y de 556 en España. El cierre de las cofradías está más cerca que nunca.