Más allá de los libros: La Biblioteca de Sant Josep de Dénia revitaliza el barrio y pone las bases para convertirlo en la “milla cultural” de la ciudad

Las nuevas dependencias reciben cien visitantes más al día en los primeros seis meses

Que las bibliotecas de hoy en día no son como las de antes es una obviedad. Libros y documentos comparten espacio con ordenadores que ofrecen acceso gratuito a Internet y están equipados para redactar documentos. Conservan en parte la vieja estética, con grandes mesas y libros que se agolpan en las estanterías, y permiten a los usuarios el goce del silencio. En la de Dénia se respira además la sensación de que la literatura, que es lo primero que nos viene a la cabeza cuando nombramos la palabra biblioteca, está en todas partes. En los libros, sí; pero también en las historias que nos cuentan -a grandes y a pequeños-; en la música; y, por qué no, en cualquier otra de las manifestaciones artísticas. El arte de escribir (y de leer) no consiste en encadenar palabras, sino en hacer que esas palabras tomen cuerpo. Y en la Biblioteca de Sant Josep van adquiriendo forma.