Raquel Payà, un cole diferente con proyección internacional

Desde 1987 el centro lucha por ofrecer una educación inclusiva con inserción en el mundo laboral

Las familias que conocen los modelos de educación ordinaria y específica abogan por la no imposición

En un momento convulso sobre los beneficios y ventajas de matricular a un estudiante con diversidad funcional en un centro ordinario o uno específico, es necesario hacer una pausa y evaluar el proyecto educativo que ofrece el Colegio de Educación Especial Raquel Payà. Está ubicado en Dénia y comenzó a funcionar en el año 1987, pero su repercusión viaja por el panorama internacional, puesto que sus profesionales son invitados a participar en charlas, simposios y programas para explicar de primera mano el funcionamiento y proceder de sus habitualidad. La máxima es clara e inflexible, tal y como asevera el director del Raquel Payà, Miquel Ivars: “vivimos y trabajamos por nuestros alumnos, tal y como hace cualquier buen profesor que se precie, con el valor añadido de que nuestros estudiantes nos necesitan capacitados al 100% por las características físicas o mentales que presentan”.

            Con el paso de los años ser diferente no es una característica excluyente, al menos así lo entiende la sociedad de la Marina Alta. Un claro ejemplo es este centro. “Se habla mucho de inclusión”, comenta Ivars “y nosotros apoyamos este tema, lógicamente, pero cuando vemos que lo que se fomenta ahora mismo por parte de las administraciones, entre otras instituciones, son cuestiones que nosotros llevamos trabajando desde hace 12 años, nos hace estar más orgullosos”.