Regional Preferente: El “pichichi” del Pedreguer es… un centrocampista forjado en casa
“Al final siempre reúnen las bajas y las lesiones de jugadores, y esto se traduce en oportunidades para los otros”
Pocas veces en su historia el Pedreguer habrá dispuesto a lo largo de una temporada de tantos delanteros como en la presente. Hasta diez han desfilado por las alineaciones en los veintisiete partidos disputados. Algunos de ellos arietes con mucha experiencia y renombre, pero que han acabado decepcionando y marchándose por la puerta de atrás antes de tiempo, y otros más jóvenes con un horizonte muy prometedor -Maverick y los juveniles Arnau y Alex Serra-, pero todavía en una etapa muy incipiente. Entre unos y otros, gente como Alfie, Kevin o Alioune Diop, con ADN Pedreguer -muy trabajadores y luchadores-, pero todos ellos con la pólvora mojada. Los números hablan por sí mismo: solo 25 goles a lo largo de la temporada -no llega a un gol por partido-, y el título de segundo equipo menos realizador del grupo, igualado con el Contestano. Tan solo tiene peor registro el Algemesí, con 16.
Aquello más curioso, tal vuelta no tanto casual, es que, frente una tan vasta nómina de delanteros, el “pichichi” del Pedreguer resulta ser un centrocampista, esto si con talla ofensiva, y además de los que se han forjado sin tener que salir del pueblo. Abel Roselló, Abel, con seis goles -dos de ellos en nuestra Copa-, es un jugador que ha recorrido todas las categorías del fútbol base de Pedreguer hasta reunir este año a convertirse, con los 22 años reciente cumplidos, en el máximo goleador del equipo que milita en la Preferente. Todo esto sin hacer demasiado ruido, desde la discreción, y sin haber tenido las oportunidades para jugar que tal vuelta ha merecido, y que si han disfrutado otros delanteros.
Sus goles en liga han sido, sobre todo, muy trascendentes. El primero para redondear una gran victoria en la jornada 2 a Gandia. En la ida ante La Nucia B marcó, pero el Pedreguer perdió. Y los otros dos goles han significado dos importantísimas victorias por 1-0, ante La Font -jornada 23- y el Sueca -la semana pasada-, y seis puntos que han situado en el Pedreguer en la rampa de salida de los lugares de descenso.
Su virtud siempre ha sido la exquisita habilidad con el balónen los pies, junto con el trabajo desde la humildad. y la constancia. Ahora también la paciencia, que se ha examinado esta temporada. Solo ha sido titular en once partidos, y ha jugado tres enteros. Solo ha faltado en dos convocatorias, una de ellas por sanción. En 5 ocasiones no ha dispuesto de minutos de juego, y en el resto la mayoría o ha salido desde el banquillo o ha sido sustituido, con una media de 39’ de juego por partido, porcentaje que ha mejorado en las últimas jornadas cuando ha empezado a participar con más regularidad.
Abel debutó con el primer equipo en la edad de juvenil, cuando encara el Pedreguer militaba a la Primera Regional. Desprendido la etapa de formación hizo el bote a la Preferente en la primera temporada de los *blavets en esta categoría, aquella que se interrumpió por la covid. La presente es, pues, su tercera temporada en la máxima categoría del fútbol regional valenciano.
“A lo largo de la temporada, hacia el final, siempre reúnen las bajas y las lesiones de jugadores, y esto se traduce en oportunidades para los otros”, comenta Abel. Él ha sido paciente, primero para ganarse la oportunidad, después para aprovecharla, y ahora lo da todo para mantenerla. Se muestra además un jugador agradecido: “he tenido tres entrenadores distintos y todos me han dado oportunidades”. De este último, *Suso, con el cual ha vuelto ha disponer de minutos, piensa que le ha dado “la confianza y la continuidad que necesito, y yo mientras tanto me dedico a trabajar todo el que puedo y dar el máximo”. Abel está convencido que el equipo se mantendrá a la categoría una temporada más. “En los últimos partidos nos ha acompañado por fin los resultados, y el equipo está en buena dinámica”, asegura.
Para el míster del Pedreguer, Suso, se trata de un jugador “con mucha calidad y con mucho de criterio con el balón en los pies”, y que además “tiene mucho de gol”. “Es un jugador que puede evolucionar mucho, porque la calidad la tiene, y si mejorara el aspecto físico podría dar un paso adelante muy importante”, añade.
Abel se desenvuelve en del campo como un jugador creativo y de buen trato con el balón, entregado, disciplinado y que asimila muy bien los conceptos tácticos. En la distancia corta se aprecia además que tiene el corazón blavet y que se siente muy a gusto jugando en su pueblo.