Una pareja de valencianos, los primeros visitantes del Castell de Dénia tras la reapertura

  • Una pareja de valencianos, los primeros visitantes del Castell de Dénia tras la reapertura
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  • Una pareja de valencianos, los primeros visitantes del Castell de Dénia tras la reapertura
  27/06/2020

Eva y Carlos han sido los primeros visitantes post-covid del Castell de Dénia. Procedentes de Valencia, estaban de vacaciones en la ciudad desde el martes. El viernes, cuando el castillo abría por primera vez las puertas después de tres meses, aprovecharon la mañana para conocerlo. Quisieron hacerlo el día anterior, pero aún estaba cerrado. En su último día en Dénia antes de regresar a casa, fue posible. No era la primera vez que venían a la ciudad, aunque nunca habían subido al castillo. Ahora, de regreso en Valencia, tienen dos cosas más que contar: la experiencia de visitarlo y haber sido los primeros en hacerlo tras el confinamiento.

        No son los únicos. También Elia, Iris y Paula podrán contar que fueron los primeros visitantes locales. Poco después de las once llegaron ellas. Viven cerca y echaban de menos subir al castillo, como tienen costumbre. Ahora ya pueden hacerlo pero, como todos los visitantes, con limitaciones. No se puede visitar la zona de Els vergerets -el Verger Alt sigue cerrado por unas obras que continúan paradas- y el Verger Baix es inaccesible por el estado de la vegetación. Habrá que esperar.

La visita se realiza ahora en una sola dirección. Hay que seguir un itinerario fijo para la subida -el camino empedrado de la Vila Vella- y otro para la bajada -la carretera asfaltada-. Hay excepciones, como aquellos que llevan niños con carrito o las personas con diversidad funcional. Otras cosas a tener en cuenta serán el uso de mascarilla obligatoria en el Museu Arqueològic y la limitación de aforos: 225 personas en todo el recinto (frente al aforo máximo habitual de 750) y 25 (frente a 83) en el museo. Hay que advertir también al visitante que no se acerque a las gaviotas ni a los polluelos que, por cierto, se cuentan por cientos. Y por supuesto, pro si aprietan el calor y la sed, que arriba hay cafetería.

 

 

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