A la luna de Valencia: Los puentes
Estamos en pleno acueducto de diciembre y en medio de una polémica que han suscitado los puentes, acueductos y festivos varios. Para que nadie se llame a engaño les diré que estoy a favor de los puentes, porque no nos van a hacer más pobres, ni las primas de riesgo nos van a acosar más por tenerlos, ni los mercados van a ser menos inclementes con nuestros ahorrillos por renunciar a ellos.
Es cierto que las industrias en las que funcionan cadenas de producción si que les afectan los puentes, lo que se traduce en unas pérdidas de beneficios, eso dicen. Pero que ya debe estar contemplado en los capítulos de pérdidas, ya está descontado.
Por otro lado, durante los puentes se incrementan los viajes, con el consiguiente gasto en hoteles, restaurantes, copas, salas de fiesta. Un puente puede compensar los resultados económicos de una mala temporada hostelera. También los comercios de las zonas que concentran actividad en los puentes, los reciben como agua de mayo y más en diciembre.
Habría que añadir que estos puentes se contemplan en los convenios colectivos, esos que tanto interés tiene en suprimir la patronal española, en el cómputo anual de horas trabajadas y festivas. Es decir, es una parte del salario, lo que se llama el salario social, que incluye vacaciones, asistencia sanitaria, aportación a la pensión de jubilación, ese salario que tanto les molesta a los malos empresarios.
Me pregunto si también se van a cuestionar los días perdidos, es un decir, por la participación en las fallas, que en el"cap i casal" tienen cada vez una mayor duración, con cierres de vías urbanas por variadas circunstancias que van de los pasacalles a la instalación de carpas, iluminación y adorno de calles, plantà anticipada de las fallas. Otrosi digo de fogueres y gaiates. Pero de esas fiestas, ni se les ocurra criticarlas, que se les puede acusar de ser mal patriota (valenciano, alicantino, castellonense) y en el supuesto caso de que les nombren para un cargo institucional, senador venga por caso, no puedan pasar el examen de valencianía, como si la valencianía fuese medible con un valenciómetro. Si así fuera, no sabemos que puntuación sacarían aquellas y aquellos que para que nos les acusen de catalanistas, supongo, solo hablan en castellano.