A la luna de Valencia: Puchades
El 24 de mayo de este año 2013, moría Antonio Puchades Casanova, el número 6 del Valencia C.F., que hubiese cumplido 88 años el 4 de junio. Dicen que ha sido el mejor jugador valenciano y del Valencia, recordándosele por su colocación en el campo, su incansable brega, convirtiéndose en un muro difícilmente franqueable por los delanteros contrarios. El medio campo era su parcela y su feudo. También se decía de él que tenía escasa técnica, por lo que le asociaban con otro medio más "técnico", entre los que destacaron Sendra y sobre todo Pasieguito.
Con la selección nacional jugó el campeonato del Mundo de 1950, siendo su compañero en el medio campo el barcelonista Gonzalvo III, con el que formó una media inolvidable para los aficionados futbolísticos de aquella época. Ese campeonato del Mundo es recordado por el "maracanazo", la pérdida de la final de la Copa del Mundo por el equipo del Brasil, un equipo con grandes jugadores, en su propio estadio de Río de Janeiro, el estadio de Maracaná, ante Uruguay. España quedó cuarta.
Se ha lanzado una iniciativa desde el club valencianista, que consiste en retirar el número 6 de las camisetas del equipo, en recuerdo de su gran jugador Antonio Puchades, mas conocido como Tonico, pero también por otros grandes jugadores que han jugado en esa demarcación, como David Albelda, que es el que más recuerda por su estilo de juego al ídolo de Sueca, a los que los aficionados de la época llamaban el sueco, pues no solo había nacido en esa ciudad de la Ribera, sino también por su pelo rubio y su aspecto nórdico, aunque el jugador siempre estuvo apegado a su tierra y se metía en los arrozales para ayudar a su cultivo. Su espíritu campesino es recordado porque en su primer partido con el Valencia C.F. fuera de la ciudad del Turia, su madre le dio una cesta con comida para el viaje y la estancia.
Descanse en paz Antonio Puchades, que para los adolescentes de la época, los años 50, fue un auténtico ejemplo a imitar. En estos tiempos de falsos ídolos de papel, Antonio Puchades no hubiera tenido la repercusión ni por su juego, ni por la trayectoria vital que tuvo, acostumbrados como estamos a que los ídolos actuales están a toda hora en los medios de comunicación, no siempre por su buen juego. Entonces fue un ídolo de las aficionados, no solo del Valencia C.F. sino de toda España. Descanse en paz.