Amanece una envidiable playa, anochece un asqueroso vertedero

Recorridas las playas de nuestras costas, debo reconocer que el trabajo de las empresas contratadas por los Ayuntamientos para su mantenimiento es, IMPECABLE.

Las playas amanecen impecables, unas más que otras, es cierto, pero todas por encima del listón aceptable.

Mérito de las empresas y los Ayuntamientos que las han contratado y controlan su trabajo.

Los primeros veraneantes llegan con sus sobrillas, toallas, mesitas, sillas, neverita con aperitivo, comida y merienda.

Se van acomodando, cuanto más cerca de los que madrugaron más, mejor, así se amontonan incómodamente molestándose salpicando arena al levantarse o agua al volver de la orilla.

Recordemos que hay zonas donde los kilómetros de playa son muchos, pero no, se instalan grupos de amontonados entre maravillosos espacios solitarios.

Ni qué decir del que hace de DJ poniéndonos la radio o el IPod a toda pastilla con un ruido al que llama música y nosotros evaluamos como terrorismo playero.

Así va pasando la mañana, entre cervecitas o isotónicas, manitas de la parejita de la toalla de al lado rayando el espectáculo "X", bañadores llenos de michelines, juanetes llenos de pies y gritos, muchos gritos, que la paz está anticuada.

Poco a poco, según pasan las horas, no nos queda más remedio que reconocer el bajo nivel del turismo de "la lata de tomate", ese que ya no nos salva porque si los hoteles se llenan es porque hay menos hoteles y los precios han bajado hasta el listón igualmente bajo.

¿Cuál es el termómetro en el que se basa semejante afirmación?

El de las ocho de la tarde.

A medida que los veraneantes van recogiendo, sus cosas, porque las que ya no son suyas se quedan en la playa entre papelera y papelera.

No es por falta de papeleras porque haberlas "haylas" y sobradamente.

Es por falta de educación, sólo eso.

Así después de las ocho de la tarde, encontraremos los más variados deshechos para reciclar esparcidos por una larguísima franja de arena que por la mañana fue una envidiable playa y por la tardecita es un asqueroso vertedero.