ANGEL SERRANO ZURITA (*)/ La cazadora cazada

Para un dianense no es agradable ver el nombre de su ciudad vinculado a la corrupción en un telediario de ámbito estatal. Por desgracia, esa desazón viene siendo demasiado habitual. De ello, debemos dar las gracias a nuestra ex alcaldesa, que vino a salvar Dénia, moción de censura mediante, de la presunta mala praxis política que los socialistas de Paqui Viciano estaban llevando a cabo. Un argumento para asaltar el poder que ha venido a demostrarse como falso.

            Tras tener que ver la imagen del Panterre en los apartados televisivos que hablan de la trama Púnica, ahora, la ciudadanía se postra frente a la caja tonta y vuelve a sentir una gran vergüenza. El Juzgado de Instrucción número 7 de Alicante ha abierto diligencias por el denominado caso Fitur del Patronato de Turismo Costa Blanca, en el que se investiga el pago de más de tres millones de euros a una trama de empresas vascas. Ahí, aparece, de nuevo, el nombre de Ana Kringe. Y es que, en los años en que ejerció de gerente del organismo provincial, firmó el pago de más de 750.000 euros a las mercantiles investigadas.

            Por lo que se ve, Alfonso Rus no era el único cargo del Partido Popular al que le gustaba contar los euros de mil en mil. Esperemos que, tras esta noticia, los dianenses no tengan que lidiar, encima, con fotos en redes sociales de una nueva expedición europea de la ex primer edil y su corte -conformada por gente honrada y honesta, hasta donde yo sé-, como si nada hubiera pasado.

            Floriano decía que al PP le faltaba piel. A Kringe lo que le falta es algo mucho más fundamental: la decencia.

(*) Periodista