Apaciguar la ansiedad con plantas
??INÉS ROIG (*)
La sobreexcitación, la angustia, la ansiedad y el nerviosismo son sensaciones muy habituales para un elevado número de personas. No obstante, cuando estas emociones sobrepasan los límites considerados “normales” y afectan al desarrollo de las actividades diarias, es posible que nos encontremos ante una enfermedad (normalmente un trastorno de ansiedad) y que la persona requiera de un tratamiento médico.
Sin embargo, en la mayoría de los casos, el estrés, los nervios y la ansiedad son elementos con los que tenemos que aprender a convivir y que, aunque no resulten demasiado agradables, no suponen un peligro para nuestra salud. Basta con conocer cómo actuar cuando se presentan y qué medidas adoptar para mitigarlos y recuperar el bienestar.
VALERIANA: Indicada para reducir la tensión emocional acumulada en los músculos, estados de ansiedad, irritabilidad y problemas de sueño.
MELISA: Se utiliza para aliviar la tensión, los nervios, la inquietud y los problemas de sueño, induce y mejora el sueño.
PASIFLORA: Ideal para estados de intranquilidad, ansiedad e irritabilidad. También facilita la conciliación del sueño.
TILO: Las flotes del tilo poseen propiedades antiespasmódicas, sedantes, relajantes y somníferas. Por ello, se utilizan especialmente para calmar la ansiedad y los nervios.
AMAPOLA: Se utilizan para tratar enfermedades y trastornos de las vías respiratorias, así como para combatir estados de ansiedad e insomnio.
AMAPLOA DE CALIFORNIA: Se emplea como analgésico, ansiolítico y sedante. Es muy común su uso para hacer frente a los cambios de estación, a la depresión y al insomnio.
ANGÉLICA: Entre sus acciones terapéuticas destaca su poder para combatir la ansiedad, el dolor de cabeza tensional, el insomnio y la pérdida de apetito.
ESPINO ALBAR: Se utiliza para tratar alteraciones leves del ritmo cardíaco como la taquicardia (asociada al nerviosismo). Es de gran utilidad en el tratamiento de la ansiedad y del insomnio.
HIPÉRICO: Conocida por su uso como tratamiento para la ansiedad, la fatiga nerviosa, los estados depresivos moderados y suaves y los terrores nocturnos.
LÚPULO: Se emplea esta planta para reducir los problemas de sueño y los trastornos de ansiedad. También está indicada en caso de inapetencia o espasmos gastrointestinales.
LAVANDA: Es idóneo entre otras acciones, para combatir la sensación de ansiedad, las dificultades para conciliar el sueño y los efectos de estos problemas, como la taquicardia o la tensión acumulada en los músculos.
KAVA: Aunque puede llegar a ser tóxica si se consume en grandes cantidades, es una especie vegetal utilizada para tratar la ansiedad, los problemas de sueño y el nerviosismo (especialmente durante la menopausia).
(*) Farmacéutica