JAIME MONFORT MIRALLES (*)/ El juego en la formación y desarrollo de nuestros cachorros
No olvidéis nunca la importancia que tiene el juego en sus etapas principales de formación. Bien a nivel físico o mental el juego le ayudará a su desarrollo, reforzará el vínculo con vosotros, aprenderá a conocer sus límites, el control de su mordida, trabajará su instinto de caza, el olfato, adquirirá seguridad y confianza, en definitiva le aportaremos una parte de naturaleza que muchas veces y por desgracia se olvida. Para ello yo os propondría que tengáis en cuenta unos consejos:
1.- Dedicarle al cachorro mínimo unos 10 minutos al día a jugar con él, pero es también muy importante no pasaros. Debéis dejar al cachorro alegre, con ganas de más juego y con la motivación alta. No todas las razas tienen las misma características físicas. Debéis aprender a conocer cuál es su límite.
2.- Los cachorros son animales cazadores, su instinto les lleva a querer cazar. Por eso es bueno simularlo en el juego, por ejemplo con una pelota o algo que le apetezca “cazar”. Le ayudará mucho a desarrollar todas las extremidades sobre todo las traseras. Muchos cachorros son felices “cazando” y debéis de ejercitarlo.
3.- Utiliza el juego para ir sentando las bases de tu liderazgo. Aprovecha para que conozca su papel dentro de tu familia. Juega y que se divierta pero siempre debe de conocer el límite y tu posición.
4.- Márcale con el juego, desarrollando su capacidad cognitiva, normas y reglas que deberá cumplir.
5.- No dejes nunca que él te imponga sus normas, si lo hace cada vez se premiara más al conseguir lo que quiere y esto le dará un poder que le hará creer que él es el líder y no tú.
6.- Sácalo a jugar por el campo y que se relaciones con los demás perros. El juego con los demás cachorros es también muy importante para su desarrollo psíquico y físico.
7.- Si consigues todo esto, conseguirás un perro motivado y con ganas de hacer cosas, lo cual te ayudará a facilitar mucho su actitud hacia la obediencia o el adiestramiento en un futuro.
8 - La complicidad de toda la familia es también importante en la consecución de las normas que debe mantener. Tenéis que estar todos de acuerdo en ello. Si hay miembros de la familia que no lo tienen en cuenta difícilmente conseguiréis vuestro objetivo que será clave para su felicidad y convivencia con todos vosotros.
9.- Evitar los golpes de calor y la deshidratación. Los cachorros son más propensos a sufrirlos ya que su capacidad para regular su refrigeración en todavía baja. No los dejéis en el coche ni en ningún lugar que reciban directamente el sol, cuidado también con pasarse con los ejercicios o juegos bajo altas temperaturas. No olvidéis nunca el que tengan agua fresca a su alcance y buscar los sitios más frescos para su juego y descanso.
(*) Educador canino.