Mi padre es un chorizo
¿Cómo se sentirá ese chico o esa chica de unos dieciséis o veinte años, tal vez, al descubrir que su padre es un chorizo?
Pensar que durante algo más de una década su padre, que era un héroe, de repente pasa a estar en todas las portadas como un chorizo nacional de alta gama.
No me imagino a esos chicos y chicas en el colegio, el club, la hamburguesería... ¿qué pasará por sus cabecitas?
La vergüenza de la desvergüenza de sus padres tiene que ser atroz, enormemente destructiva.
Seguramente a más de uno de esos chicos se le ocurrirá pensar que su padre se daba la vida padre a costa de otros chicos que pasaron de una vida normal a la búsqueda de comida en contenedores de basura.
Pero insisto en preguntar, en intentar imaginarme si esos chorizos han pensado alguna vez en alguien más allá de sus ombligos a la hora de ser corruptos, al menos en sus hijos.
¿Con qué cara irán por sus vidas estos jóvenes hijos de corruptos desvergonzados incalificables ni siquiera en horario adulto?
Supongo que habrá amigos que se aparten disimuladamente o abiertamente, otros harán preguntas "¿y tú no sabías que tu padre es un chorizo?", ¿qué respuesta pasará por la cabecita de estos chicos y chicas ya marcados para siempre?
¿Qué podrán decir a sus hijos? ¿"Tu abuelo era un chorizo"?
Terrible pregunta de difícil respuesta, un apellido marcado para el resto de la historia es la herencia que dejan estos impresentables acotando el margen de movimiento de sus hijos, nietos y demás descendientes...para siempre.
¿Con qué cara desayunarán alguna vez con su padre chorizo?
"Ayer te vi en la tele, eres grande, hablabas de honor, decencia..."
¿Qué dirá mañana después de ver esta noche el telediario donde su padre acapara minutos de corrupción, estafas y prevaricaciones?
¿Cómo dice un chico o chica adolescente... "mi padre es un chorizo"? ¿Cómo lo digiere?