Beniarbeig aprueba su Plan General que destina 261.390 m2 para 504 nuevas viviendas y establece un máximo de población de 3.995 habitantes

Es el primer PGE que ve la luz en la comarca y permitirá regularizar las cesiones de terrenos que se llevaron a cabo para construir el nuevo colegio y la zona deportiva

El municipio de Beniarbeig es el primero de la Marina Alta que cuenta con un Plan General Estructural (PGE), y que ha sido fruto de la gestión y negociación llevadas a cabo durante las dos últimas décadas. Un documento que reclasifica 261.390 m2 a suelo urbano para poder construir 504 nuevas viviendas principalmente sobre la partida de Rases -en dirección al municipio vecino de Sanet i Negrals-, que constituye la zona de expansión del núcleo urbano.

            La Conselleria ha aprobado un plan, que ha sido celebrado desde el Ayuntamiento ya que va a determinar las pautas para el futuro desarrollo urbanístico del municipio y la regularización de algunas actuaciones consolidadas. En este sentido, el alcalde, Juan José Mas, se ha referido a las cesiones de terrenos particulares que se efectuaron en su día para poder construir el nuevo centro docente y el área deportiva, y que ahora quedan regularizadas en este documento, lo que permitirá ejecutar las compensaciones a sus antiguos propietarios.

            Es un plan con todas las limitaciones propias que recogen las leyes urbanísticas y la propia estructura de un término municipal tan reducido y consolidado, y que dejan escaso margen para la creatividad o la arbitrariedad. Eso si, ha mantenido la línea de consenso a través de los gobiernos de distinto signo que han dirigido el Ayuntamiento en las últimas legislaturas. No se contemplan excesivas disonancias sobre el patrón urbanístico consolidado en un término municipal de apenas 7,40 Km2. Quizás no se trate del que hubiera preferido el actual ejecutivo, “pero tampoco es un mal plan”, se conforma el alcalde. “Queríamos que se aprobara porque ya era el momento después de 20 años, y a partir de ahora ya se podrán proponer las modificaciones que resulten más convenientes para el pueblo”, aclara. “Quizás se podrían haber aprovechado muchas de las zonas que se han catalogado como inundables”, se lamenta Mas.

            El documento establece el desarrollo del municipio con los modelos de ciudad compacta, y recorta las alturas de las viviendas del casco urbano que serán de planta baja y una sola altura. Los 4 sectores de nuevo desarrollo (tres de uso residencial por las zonas de las urbanizaciones Mirabons y Monte Corona y uno de uso terciario) se ubican todos ellos adosados al suelo urbano, y se desclasifica un sector de 266.717 m2 se suelo alejado del casco urbano y ubicado en una zona de alto valor paisajístico o paisajístico.

            En su conjunto, el suelo urbano supone un total del 9,65% del término municipal; el suelo urbanizable el 2,89%; y el suelo no urbanizable el 87,46%. El plan prevé un estándar dotacional de 20,8 m2 de zona verde por habitante, justo el doble de lo que exige la ley (10 m2 por habitante). Además, se construirán 182 viviendas de protección pública. El actual polígono industrial mantiene su margen de crecimiento hacia la zona deportiva.

COMPENSACIONES DE TERRENO

            La prioridad tras la aprobación del PGE por parte de la comisión territorial de Urbanismo es, según apunta el alcalde, ejecutar la reparcelación para llevar a cabo la compensación a los propietarios de los terrenos que fueron cedidos en su día, mientras avanzava lentamente la tramitación del documento, para la construcción del nuevo centro escolar y la zona deportiva. “Tener el crecimiento del pueblo determinado y que esas personas que cedieron terrenos puedan recuperar las parcelas que le corrresponden” son las dos grandes noticias que deja el PGE según el alcalde. “Al final, creo que ha valido la pena tanto esfuerzo”, insiste, a la vez que hace extensible el logro con sus predecesores en el cargo, los ex alcaldes Vicente Cebolla y Luis Gil, y agradece “la paciencia” del arquitecto que ha dirigido las actuaciones, Quico Forqués.