Cinco formas de escapar de los resfriados
INÉS ROIG (*)
Se acabaron las narices rojas, los pañuelos de papel y los oídos taponados.
El cambio de estación no tiene por qué estar reñido con una salud de hierro. No, al menos, si se toman las precauciones adecuadas. ¡Empezando por sacar la chaqueta del armario! Y es que dejar al azar la posibilidad de ponerse enfermo no es buena idea si, a diario, compartes oficina con el virus.
1. Manos siempre limpias ¿Sabías que la pantalla de un “smartphone” puede albergar más de 600 bacterias? Aunque parezca algo obvio, muchas veces nos olvidamos de que las manos están en constante contacto con el exterior, y que todas las cosas que nos acompañan, también. Por eso, una buena forma de prevenir infecciones es, simplemente, lavarse bien las manos antes de cada comida y, sobre todo, después de utilizar transporte público. De la misma manera, no está de más limpiar aquellos objetos que manipulamos con frecuencia, como el teléfono móvil.
2. ¡Ejercicio! Sí, el ejercicio, además de para adelgazar y liberar estrés también puede ayudarte a salir ileso del inverno. De hecho, practicarlo con regularidad puede reducir hasta en un 50% el riesgo de sufrir un resfriado. Esto se debe a que el cuerpo responde a los esfuerzos realizados durante la actividad física aumentando las defensas.
3. No encerrarse en casa A pesar de que con la llegada del frío apetece menos salir de casa, lo cierto es que la exposición insuficiente a la radiación solar afecta directamente sobre el sistema inmune, ya que se reducen los niveles de vitamina D, implicada en este proceso. Además, es esencial para la absorción del calcio y el fósforo. Por eso, los expertos recomiendan aprovechar un rato del día para salir a la calle y aprovechar los pocos rayos de sol que haya, y aumentar el consumo de alimentos ricos en esta vitamina, como pescados, huevos, leche, mantequilla o setas.
4.Cocinar con especias. Además de aportarle sabor y un toque diferente a tus platos, las especias están relacionadas con la prevención de los resfriados gracias a sus propiedades antisépticas y antiinflamatorias. De hecho, las que tienen más capsaicina, es decir, las picantes, aumentan la temperatura corporal dificultando la reproducción de los microorganismos y favoreciendo la sudoración, clave para eliminar toxinas.
5. Cocinar, a secas. Preparar tu propia comida es la manera más sencilla de cuidar tu alimentación. Y es que comer fuera de casa rara vez se ofrece como una opción saludable. Sin embargo, una dieta nutritiva y variada es una poderosa arma contra los resfriados, ya que a través de los alimentos y sus propiedades preparamos al organismo para defenderse frente a las amenazas. Es más, si tu intención es no resfriarte, hay algunos ingredientes que no deberían faltar en tu despensa, como los ajos y las cebollas, yogures o kiwis. Mientras que los dos primeros calman los síntomas de la tos, desinfectan las mucosas y combaten los virus con sus compuestos azufrados, los yogures aportan probióticos que fortalecen la flora intestinal (y, por tanto, las defensas) y los kiwis la vitamina C y los antioxidantes perfectos para luchar contra la gripe. De hecho, una pieza de esta fruta al día ya cubriría los requerimientos diarios de esta vitamina.
(*) Farmacia Las Marinas.