Grimalt: “Si abriéramos la calle Marqués de Campo al tráfico, los bares no podrían sacar mesas ni sillas”

No ve relación entre la peatonalización y la bajada de las ventas en los comercios

Por mucho que lo repita, el mensaje del alcalde de Dénia sobre la peatonalización de Marqués de Campo no ha llegado a calar entre muchos vecinos y comerciantes, que aún tienen la esperanza de que se vuelva a permitir el paso de vehículos por la calle. O que al menos se autorice hasta las 18.30 horas. Dicen que la decisión del equipo de gobierno ha provocado una bajada del flujo de gente y que las ventas de los establecimientos han caído de forma preocupante al no haber forma de acceder en coche, como ocurría antes.

            Vicent Grimalt, que el miércoles respondió en directo a las preguntas de los internautas a través de la herramienta Facebook Live, dejó claro por enésima vez que el cierre al tráfico de la calle se va a mantener, recordando que se aplicó a mediados de marzo fundamentalmente para “facilitar el paso de los peatones con la distancias que se nos exigían”. Hay otro motivo: permitir que las terrazas de los bares y restaurantes se ajustaran a las normas sanitarias. Grimalt comentó que la hostelería es “un sector importante, que emplea a muchas personas”. Y advirtió de que “si abriéramos la calle al tráfico, los bares no podrían sacar mesas ni sillas”, lo que les llevaría a una situación difícil, teniendo en cuenta que ahora está prohibido servir en las barras. Tras recordar que la hostelería ha sido uno de los sectores más afectados por la crisis del coronavirus, aseveró que “no vamos a sacrificar las terrazas de los bares”.

            Algunos vecinos pidieron que se reabra el tráfico por la calle, argumentando que muchos negocios van a tener que cerrar. A juicio del alcalde, no hay relación entre la peatonalización y la pérdida de negocio de los establecimientos. Puntualizó que actualmente los compradores se están decantando por formas alternativas al comercio tradicional.