Las nuevas normas de la construcción de Dénia llegan con cinco años de retraso y no gustan a los empresarios

Ripoll dice que el documento repercutirá positivamente en la transparencia, la agilidad administrativa y la seguridad jurídica de las obras

La redacción de la nueva ordenanza de la construcción de Dénia ha seguido un largo proceso interrumpido por distintas causas, entre ellas la llegada de la pandemia del coronavirus. En los últimos meses, los técnicos municipales se han puesto las pilas y han entregado el documento, que ahora se va a exponer al público durante un mes para dar la oportunidad a que se presenten alegaciones. El jueves que viene habrá una nueva reunión de la comisión de trabajo.

            La concejala de Territorio, Maria Josep Ripoll, ha defendido las bondades del documento, que introducen mejoras sustanciales respecto a la versión de 2016. En realidad, es una modificación de la ordenanza que ya existía, por lo que el Ayuntamiento no ha partido de cero. Tras ser estudiada por el Consell de Urbanismo, el primer borrador se expuso al pleno en marzo de 2017. Después, todo se paralizó hasta que en 2019, siempre según el relato de la concejala Ripoll durante el pleno del jueves, los trabajos se reanudaron.

            Tal como ha explicado, la ordenanza clarifica conceptos técnicos que generaban dudas entre los profesionales. Ripoll opina que el nuevo documento repercutirá positivamente en la transparencia y la unificación de criterios, en la agilidad administrativa y la seguridad jurídica a la hora de dar licencias. Según ha explicado, en un primer momento solo se recogían aspectos relacionados con las normas de construcción y “el nuevo documento también recoge los criterios que tienen que tener los proyectos de obras y de urbanización, criterios en materia de alumbrado público, de extracción de humos, aires acondicionados, jardinería, alcantarillado y sobre todo, como novedad, incorpora la regulación el funcionamiento de las entidades colaboradoras, que están amparadas por un decreto de Conselleria para poder tramitar las licencias de obra”. Se trata, por ejemplo, del Colegio de Arquitectos.

            A la hora de redactar las normas, han participado los profesionales del sector a través de las asociaciones.

            Durante el pleno, los portavoces del PP y de Gent de Dénia criticaron que “no se han tenido en cuenta muchas de las aportaciones” presentadas en el grupo de trabajo. Mario Vidal dijo que en la reunión de la semana que viene será tarde para introducir cambios y que en todo caso se podrán hacer vía alegaciones. Recalcó que eran aportaciones de los constructores y promotores. La opinión de la popular María Mut es que “se podría haber hecho más elegantemente. Primero, haber explicado la ordenanza y después pasarla por el pleno”.

            Maria Josep Ripoll argumentó que se ha dado participación a los agente implicados, aunque “no se pueden asumir todas las aportaciones”. Indicó que aún “estamos en el proceso de participación pública” y que la semana que viene se escuchará a los agentes implicados en este asunto. Además, comentó que cualquier ciudadano puede alegar antes de que se apruebe el documento definitivo.

            La nueva ordenanza salió adelante con el apoyo del PSPV, Compromís y Ciudadanos. PP se abstuvo y Gent de Dénia votó en contra.