Practica la natación durante tu embarazo
Dr. MARIANO MARTÍN-LOECHES DE LA LASTRA (*)
¿Puedo practicar natación durante el embarazo?
La natación es uno de los mejores ejercicios que puedes practicar sin ningún inconveniente durante todo el embarazo. El hecho de flotar en el agua permite que tonifiques todos tus músculos sin que los fuerces violentamente, como lo hacen otras actividades más violentas. Además la natación también te va ayudar a la hora de mantener tu peso, ya que te hace que quemes esas cuantas calorías de más que tu bebé no necesita.
¿Cuáles son los beneficios?
Se comprobó que la natación, aparte de tonificar los músculos, relaja, mejora la capacidad respiratoria y la posición de tus vértebras, disminuyendo los dolores de espalda tan frecuentes durante el embarazo. Además de ser una actividad física muy divertida que puedes realizar con tu compañero, el agua hará que pierdas la sensación de sobrepeso corporal, especialmente en el último trimestre del embarazo y te aliviará de tus molestias y dolores.
¿Qué precauciones debo tomar?
Debes evitar zambullirte especialmente durante el segundo y tercer trimestre del embarazo para evitar resbalones, debido al cambio de tu centro de gravedad, y para que tu panza no golpee directamente en el agua. Y al igual que si no estuvieras embarazada debes tener cuidado de no nadar en zonas donde haya gente que se zambulla, para evitar que alguien impacte directamente sobre tu cuerpo.
¿Dónde se puede practicar?
Actualmente existen muchos lugares que se especializan en cursos de natación durante el embarazo e incluso existen grupos de gimnasia acuática, también muy recomendables para la mujer embarazada. En nuestra Clínica disponemos de dos matronas especializadas en gimnasia en el agua (matronatación) y realizamos habitualmente cursos para las embarazadas. No lo pienses más y... ¡al agua pato!
Realizar ejercicio físico durante el embarazo, además de ser una fuente de salud garantizada para el futuro bebé, es una manera excelente de regular el aumento de peso de la embarazada y ayudar a evitar la incómoda sobrecarga de piernas y espalda, sobre todo en el último trimestre de la gestación. La natación es el deporte más completo y relajante para la futura madre. Además, se puede realizar hasta el momento del parto y ayuda a las embarazadas a disminuir la ansiedad, dormir mejor y favorecer su circulación sanguínea.
En el agua sólo pesas una décima parte de tu peso real por lo que la capacidad de movilidad es muy amplia. Al nadar realizas ejercicios que en seco serían muy complicados e incómodos para ti. Los suaves movimientos hacen que tus articulaciones apenas se resientan y gracias a la posición horizontal no haya sobrecarga en piernas, brazos y zona lumbar. Además, reducirás los dolores de espalda gracias a los constantes estiramientos que realizas al nadar.
La actividad aeróbica hace que mejore tu sistema respiratorio, haya menos presión sobre el nervio ciático y la circulación de la sangre llegue mejor al feto. Al activarse y mejorar la circulación, evitarás las molestas y antiestéticas varices, así como la retención de líquidos. La zona del recto también se libera de presión, por lo que si tienes hemorroides es posible que mejoren.
Los efectos relajantes del deporte son una realidad. Además de mejorar tu flexibilidad te sentirás emocionalmente muy positiva. Lo más importante es que estés activa, disfrutes del ejercicio que practicas y te relajes mientras lo realizas.
(*) Especialista en Ginecología y Obstetricia.