Marco Blanquer ficha por el Real Madrid

El cocinero de Dénia es el responsable en Dubai de los restaurantes y cocinas del primer parque de atracciones dedicado al equipo de fútbol

“Es una etapa profesional muy bonita y un proyecto muy desafiante”

Situado en una zona exclusiva de Dubai, el Real Madrid World abrió sus puertas al público el martes 9 de abril. El primer parque de atracciones del mundo dedicado al equipo de fútbol permite disfrutar de muchas de aquellas cosas que gustarían a cualquier aficionado merengue y, además, comer paella, tapas y churros en algunos de sus restaurantes, quioscos o food trucks. Al frente de ellos y de sus cocinas está Marco Antonio Blanquer Torres, el atrevido y ambicioso chef dianense que hace doce años encontró en Emiratos Árabes el lugar donde desarrollar su carrera profesional. Su sueño de ser futbolista se vio truncado por una lesión cundo jugaba con el Dénia pero su pasión por el equipo blanco sigue viva. Ahora, es el Speciality Chef del nuevo parque temático, donde no solo se hace cargo el diseño de los menús sino también de tareas como la contratación del personal, su formación o el funcionamiento de la central de compras.

Para Marco Blanquer es “un orgullo” haber sido seleccionado para este puesto. Satisfecho de que se haya depositado tanta confianza en él, está convencido de que las cosas no ocurren porque sí. Ha estado trabajando durante muchos años en Emiratos Árabes, sobre todo en restaurantes de hoteles, y ha desarrollado habilidades que van más allá de ponerse al frente de los fogones. Saber manejar al personal, formar un equipo, ser capaz de diseñar proyectos o llevar la administración son responsabilidades que se valoran cuando se habla de proyectos grandes y ambiciosos como éste. Trabajar con la marca Real Madrid, “el equipo de mi vida y la marca más importante que hay en estos momentos” es embarcarse en una aventura desafiante. “No he venido aquí por el dinero, porque en otros sitios ganaría más, sino por el proyecto en sí y por el crecimiento personal que puede suponer para mí”, confiesa.

Como parte del complejo Dubai Parks and Resorts, el parque temático Real Madrid World ofrece a los visitantes experiencias como contemplar los trofeos y balones de oro o las camisetas históricas, visitar los vestuarios del equipo, sentarse en la sala de prensa o pasear por la Cibeles, lugar de celebraciones. Entre recreaciones y propuestas de ocio -en el recinto hay quince atracciones y también espacio para el equipo de baloncesto, la academia de fútbol y los equipos juveniles y femenino-, se ofrece también la posibilidad de comer en alguno de los dos restaurantes que dirige Marco Blanquer. Hala Madrid tiene capacidad para 450 comensales, si se cuenta también la terraza, y junto a pizzas, perritos y hamburguesas -comida rápida habitual en los parques de atracciones-, nuestro chef ha incluido alguna ensalada sencilla, cuatro tapas, paellas y tres postres, entre los que no podía faltar, claro está, el merengue, que acompaña con crema de limón. Academy Café -réplica de la cantina a la que acuden los jugadores- puede dar servicio a entre 150 y 200 personas y en ella podremos degustar tacos, quesadilla, sándwiches, hamburguesas y wraps.

Pero ahí no queda la cosa. Para matar el hambre, en los quioscos y food trucks repartidos por el parque encontraremos bocadillos de calamares con alioli, bravas, churros o masala fries, propuestas para todos los gustos y paladares.

Blanquer cuenta que está previsto inaugurar un tercer restaurante antes de que acabe el año, el Real Madrid Café, con comida más elaborada, carnes de cocción lenta y a la brasa y paellas a la leña. Estas últimas, como las que ya prepara el restaurante Hala Madrid, hechas con paellero, como ha de ser. 

Los meses previos a la apertura han sido “muy estresantes”, con la formación del personal -tiene 18 personas en cocina a su cargo-, la dotación de equipamiento, diseño de menús y demás. Empieza ahora “una etapa profesional muy bonita”, señala, “con un proyecto muy desafiante, gente con la que no he trabajado antes e ideas nuevas” que quiere aplicar para que la comida salga más rápida, mejor presentada, con mayor calidad y con sabores bien definidos. A punto de cumplir los 40 años, se siente satisfecho profesionalmente -no puede decir lo mismo a nivel personal, “soy un poco complicado y exigente”, reconoce- y sobre todo orgulloso de estar donde ha llegado. 

En Dubai, mientras contesta a nuestras preguntas, se acuerda de quienes se encontró por el camino y le tendieron la mano, como hizo en su día nuestro director Paco Serradell. En esta ocasión, por un doble motivo. “Paco era socio del Real Madrid y con su pase yo fui varias veces al Bernabéu -recuerda-, él siempre me apreció y, con 16 años, me dio trabajo en CANFALI MARINA ALTA”. “Pienso muchas veces qué hubiese dicho él en vida si me hubiese visto aquí o si tal vez vendría a visitarme”, añade.