El gobierno de Xàbia pide disculpas por las molestias que genera el incendio de Ramblars

Poco habitual en política gestos de este tipo. Pero el Ayuntamiento de Xàbia ha pedido disculpas por las molestias que ocasiona el incendio en la planta de transferencias de Ramblars, con los olores y humos que vienen soportando desde hace más de un mes los vecinos. Y poco más puede hacer, porque la combustión de este tipo de material -residuos verdes compactado- se toma todo su tiempo. De momento también se colabora con la investigación que está llevando a cabo la Guardia Civil y se siguen las recomendaciones de los bomberos de cara a la extinción: creación de cortafuegos, enfriado de los montones de residuos verdes o utilización de tierra en las pilas de menor altura.
    Tal y como señala la concejala de Servicios, Kika Mata, el incendio está siguiendo el patrón habitual en este tipo de fuegos, que son de combustión lenta, y ha tenido días más complejos coincidiendo con las jornadas en las que se han registrado grandes rachas de viento.
En cualquier caso, aclaran las fuentes municipales que el Ayuntamiento es el primer interesado en lograr la extinción total y acabar con los humos y molestias que provoca.

LA COMPLICADA SOLUCIÓN

    La área de Ramblars está gestionada a través de un contrato prorrogado forzosamente en 2019. Es el mecanismo que marca la ley para no dejar desatendido un espacio tras dos procesos de contratación iniciados por el Ayuntamiento -el segundo quedó desierto- y un tercero paralizado por los recursos de las empresas aspirantes. 
    La licitación vigente marca el precio por gestión de tonelada en 21 euros. Actualmente se calcula que el coste es de 40 euros por tonelada con lo que la empresa está asumiendo por imperativo un servicio que no le resulta rentable sin que la Ley de Contratos de opción de buscar otra solución contractual temporal.
    Ramblars se trata de una planta de trasferencias donde los distintos profesionales depositan restos de poda o arbóreos previo pago. También la empresa que se encarga de la limpieza viaria vacía allí los contenedores de restos vegetales ubicados en los puntos verdes, un residuo en muchas ocasiones “sucio” por la poca concienciación de la ciudadanía, que los tira mezclados con otro tipo de basuras. 
    En Ramblars permanecen temporalmente para su cribado y trituración hasta que la empresa los vende (compost, combustible, relleno vegetal etc…), una tarea complicada por el tipo de verde que se recoge (mayoritariamente restos de rama o arbustos).
    Es por ello que, tal y como explica Mata, el Ayuntamiento -junto a otros municipios con problemáticas similares como Dénia o Benissa-  hace años que demanda una solución mancomunada para “el verde” al consorcio MARE, entidad que gestiona los residuos urbanos de los 52 municipios que abarcan las comarcas de la Marina Alta y de la Marina Baja, junto con el municipio de El Campello, donde está la planta de reciclaje del orgánico. 
    La concejala apunta que esta solución que reivindican municipios como Xàbia es algo que está ahora sobre la mesa una vez solucionado el gran problema de la gestión de los residuos orgánicos a raíz de la entrada en vigor de nuevas normativas europeas. Y es que en los últimos años, el Ayuntamiento ha centrado sus esfuerzos -con una inversión de más 20 millones de euros- en acondicionar la planta de El Campello (que tenía un contrato de explotación adjudicado hasta 2029) y que no cumplía las especificaciones en materia de residuos orgánicos.
    Mata ha recordado que en materia del verde, el Ayuntamiento propuso hace dos años que se reutilizara para producir biocarbón o pellets, una propuesta que está estudiando la comisión técnica (en la que Xàbia está representada) junto a otras dos que ha recibido el Consorcio.