El Plan General prevé un crecimiento de 2.875 viviendas y un máximo de 55.000 habitantes para los próximos veinte años

Se propone proteger una amplia zona entre los caminos de Gandia y  del Cementeri para fomentar la agricultura

El equipo de gobierno apuesta por un modelo de ciudad “mediterránea, tranquila y respetuosa con su entorno”

El documento incluirá la creación del Parc Vessanes entre Torrecremada y la zona prevista para la estación intermodal junto al Chabàs

El polígono industrial se ampliaría y habría una zona terciaria en La Xara 

PSPV y Compromís han iniciado la cuenta atrás para aprobar el Plan General Estructural (PGE) que, según las previsiones se expondrá al público a partir de noviembre y durante 45 días. El documento, que ha sido debatido esta semana por los grupos políticos, plantea un crecimiento urbano sostenible, que prioriza “el uso del suelo racional frente a los nuevos desarrollos dispersos en suelo rural”, según ha destacado la concejala de Territorio, Maria Josep Ripoll. A partir de esta premisa, se prevé la construcción de 2.875 viviendas en Dénia y una población de 55.000 habitantes para los próximos veinte años.

       El PGE limita el nuevo desarrollo urbano residencial al oeste y el sur del casco urbano de Dénia ocupando 64,96 hectáreas que están por consolidar. Se trata de los sectores Platja-Torrecremada y Alqueries, donde podrían construirse hasta 2.521 viviendas. A ellas se unirían otras 150 casas en Marquesa IV y las UE Deveses I y Deveses III, desarrollados con anterioridad y que tienen suelo disponible. En La Xara se contemplan 138 nuevas viviendas y en Jesús Pobre, 66.

       En total, se podría edificar en 81,70 hectáreas, por debajo del máximo de 83 de crecimiento establecido por la Estrategia Territorial de la Comunitat Valenciana para los próximos 20 años.

       Uno de los objetivos del PGE es la protección del suelo agrícola del Pla de Dénia, una zona comprendida entre el Camí de Gandia, Benimaquia y el Camí del Cementeri, con el fin de fomentar la actividad agrícola y preservar este espacio de valor paisajístico y cultural. Esta área se calificará como suelo no urbanizable protegido. Asimismo, se protegen elementos de alto valor ambiental del Parque Natural del Montgó. Otra de las propuestas es la creación del Parc Vessanes, de 8,93 ha., que se ubicaría entre Torrecremada (junto a los colegios Pou y Vessanes) hasta la zona próxima al IES Historiador Chabàs donde se proyecta ubicar una estación intermodal. De este modo se formaría un anillo verde, que rodearía el casco urbano, conectando el Bosc de Diana por la avenida Joan Fuster con el Parc Vessanes. Esta zona verde enlazaría con Torrecremada y la nueva vía parque, un amplia avenida con amplias zonas peatonales y árboles en los lados, que reservará la parte central para el tráfico.

       Desde el equipo de gobierno se ha insistido en que se ha apostado por “un modelo de ciudad mediterránea, tranquila, con un estilo de vida fuertemente vinculado a su territorio, paisaje y cultura, como base de su atractivo para turistas y visitantes”.